Me alegro que os guste, lo traslado a la autora. Hay que ver como se ve la vida desde la barquilla.
El chambergo es un Belstaff, un poco viejo ya pero cumple su función. Hubo muchos cambios de temperatura en el viaje, en cuestión de horas pasábamos de 0 metros a 1500 y eso se nota.
Siempre compramos souvenirs, la corneta es de la armada yugoslava. Jodido de hacerla sonar, Sakamoto y alguna cosilla más la toca con la armónica mientras caen los kilómetros (yo ni me entero) y los dos tan contentos.